lunes, 18 de febrero de 2013

¿Sabes qué es la Posmodernidad y qué relación tiene con nuestros Afectos?



¿En alguna ocasión has escuchado hablar de anorexia, bulimia y demás trastornos de la alimentación; también de bullying, agresión extrema, falta de control de impulsos; ataques de pánico, ansiedad, “burnout” o estrés laboral; déficit de atención, hiperactividad, trastorno de Asperger; quizás trastornos adictivos de consumo o de imagen, o la más reciente de las adicciones, la nomofobia o adicción a los celulares?

Seguramente tu respuesta a esta pregunta es afirmativa. Quizá identifiques a alguna persona que presenta una o varias de estas nuevas sintomatologías e incluso sepas de algún otro trastorno que no se encuentra en la lista anterior, ya que ésta crece día con día.

Pues bien, desde el punto de vista psicológico, estas “nuevas enfermedades” son el resultado del mundo al que nos enfrentamos los seres humanos hoy en día. Un mundo que se caracteriza por ser tecnológicamente avanzado y perfecto, pero afectivamente limitado; desbordante en medios de comunicación, pero más aislado que nunca, individualista, exigente e inmediato, dando paso con ello a la frustración, la insatisfacción y la desesperanza como características principales. Un mundo posmoderno en donde el sujeto ha dejado de serlo para convertirse en simple objeto, a merced del flujo incesante de las mercancías. Un espacio en donde la sentencia de “lo que hoy pienso y siento, no sé si lo mantendré mañana” está a la orden del día y el “no pienso, no hago, no escucho” son las primeras tarjetas de presentación. Un mundo que muchos han decidido nombrar como una nueva era,  la era de la posmodernidad, aunque para otros sólo sea: la era del vacío.

Cada una de estas nuevas sintomatologías tiene algo importante que decir, y si ha aparecido en las sociedades de nuestro tiempo es por una justa razón. Por nuestra parte, el Grupo de Psicólogos DE(S)CIRE rescataremos algunos de estos temas y los plasmaremos en un escrito, que a manera de folleto informativo queremos compartir contigo mensualmente, para invitarte a que te tomes un espacio para leer y reflexionar. 

2 comentarios:

  1. Hola amigos de De(s)cire

    Mi nombre es David Montaño y soy Psicoanalista de Centro de Investigación y Estudios Lacanianos.

    He tenido la ocasión de leer sus dos publicaciones y no quisiera dejar la oportunidad de hacer un par de comentarios.

    El primero es un reconocimiento por utilizar este medio masivo de comunicación ya que exponer públicamente una idea, un saber y sobre todo una postura no es cualquier cosa. Plantar cara a un público (aun cuando sea virtual) habla de convicción.

    Mi segundo comentario es más bien una pregunta formal, es decir teórica. Cuando ustedes dicen "Un mundo posmoderno en donde el sujeto ha dejado de serlo para convertirse en simple objeto, a merced del flujo incesante de las mercancías" ¿como entienden ustedes el paso de ser sujetos a ser objetos?. Entiendo que un sujeto puede ser objeto para otro sujeto, entiendo también que un sujeto puede ser objeto para sí mismo pero que un sujeto se convierta en objeto es como decir que la posmodernidad nos ha convertido en tomates. Supongo que esto último no es a lo que se refieren por lo que les agradecería un esclarecimiento o al menos un fuente en donde consultar formalmente este punto.

    Finalmente otra pregunta: en su artículo de la alimentación hablan de un ir más allá de los síntomas físicos y abrir un espacio para los sentimientos emociones, placeres e historias subjetivas. Eso me parece muy bien, sin embargo sería interesante saber también cuál sería la propuesta desde la psicología en cuanto a qué hacer con esto, es decir, ustedes invitan a traer la caja de Pandora pero ¿qué propone la psicología cuando esta caja de Pandora finalmente se abre? ¿qué hacer cuando lo más mórbido de un sujeto es invocado y recibido por el médico en un proceso transferencial?

    Saludos!
    David M.R.

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  2. Hola David. Muchas gracias por el reconocimiento que nos haces. Después de este agradecimiento nos gustaría disculparnos por la demora en contestar a tus preguntas. 
     
    Consideramos que has leído muy bien nuestras dos publicaciones, al grado de que, nos da la impresión, de alguna manera tú intuyes nuestras respuestas.
    En el caso de la primera pregunta que nos realizas, nuestra respuesta, que en realidad es una respuesta que compartimos con Dany Robert Dufour en su libro "El Arte de Reducir Cabezas" es que efectivamente, la posmodernidad nos ha convertido en tomates; desde nuestro punto de vista y creemos, del autor, pareciera que así es. Esta es nuestra explicación al observar que en el mundo actual, la era del capitalismo total, las empresas por ejemplo, prescinden un día de sus trabajadores y al día siguiente éstos son reemplazados por otros, siempre en nombre de las ventas, y el intercambio comercial; la cultura de la imagen por su parte, nos exige convertirnos en el perfecto objeto satisfactor, eso sí, siempre susceptible de ser cambiado por otro mejor; el tráfico de órganos y la trata de personas, bien podrían ser casos extremos de esta búsqueda. Estos y muchos otros ejemplos, tan comunes en nuestros días, a nosotros nos hablan de que la dignidad humana, que se había venido considerando como algo apreciable, es decir, sin precio, ahora necesita tenerlo como el resto de los objetos, para fluir libremente en el mercado.
     
    Respecto a tus otros cuestionamientos: ¿Qué propone la psicología cuando esta caja de pandora se abre? y ¿Qué hacer cuando lo más mórbido del sujeto es invocado y recibido por el médico en un proceso transferencial? lo que nosotros, como psicólogos sugerimos es, analizar el contenido de esa caja de pandora, analizar la transferencia. Estamos convencidos de que en los trastornos de la alimentación y demás padecimientos actuales es importante ir más allá de los síntomas físicos para abrir el espacio al análisis de los sentimientos, emociones, placeres, e historias subjetivas. En este sentido nuestra última publicación tiene todo el peso de una invitación: para quienes presentan el padecimiento descrito, buscar ese espacio de análisis; para aquellos profesionales en el tema, arriesgarnos a trabajar la transferencia.
     
    Para finalizar queremos comentarte que ésta, es nuestra opinión y ciertamente es una opinión en la que creemos y sobre todo queremos, compartir con gente como tú, con el único fin de seguir construyendo un saber que nos ayude a entender mejor nuestra presencia en este mundo.
     
    Recibe saludos cordiales.
     
    Grupo de Psicólogos De(s)cire

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